El pasado mes de mayo la tasa anual del Índice de Precios de Consumo (IPC) general fue del 2,0%, dos décimas inferior a la registrada en abril. En cuanto a la tasa de variación anual de la inflación subyacente (índice general sin alimentos no elaborados ni productos energéticos), disminuyó dos décimas respecto a abril, y se situó en el 2,2%.
Según el Instituto Nacional de Estadística, los grupos que más destacaron por su influencia en el descenso de la tasa anual fueron la vivienda, cuya tasa anual disminuyó cuatro décimas, hasta el 3,8%, debido a que los precios de la electricidad aumentaron menos que en el año anterior, y el ocio y la cultura, cuya tasa anual disminuyó 2,2 puntos, hasta el 0,5%. Este comportamiento se debió a la bajada de los precios de los paquetes turísticos, frente al aumento en mayo de 2024.
Por el contrario, entre los grupos con influencia positiva en la tasa anual destacan los alimentos y las bebidas no alcohólicas, que situaron su variación anual en el 2,5%, lo que supuso cinco décimas por encima de la del mes pasado. Este comportamiento se debió, principalmente, al aumento de los precios de las frutas, mayor que en mayo de 2024.