La Ertzaintza ha arrestado en Irun a un hombre de 23 años acusado de robo con fuerza en domicilio. El sospechoso, con un largo historial delictivo, actuaba de madrugada, entrando en las viviendas mientras sus moradores dormían.
El último episodio se produjo la madrugada del miércoles, cuando el joven accedió por un balcón a una casa del barrio de Lapitze y se llevó varios teléfonos móviles, una cartera y otros objetos. Sorprendido por el propietario, huyó del lugar. La víctima denunció lo ocurrido en la comisaría de Irun y la investigación permitió identificar rápidamente al presunto autor.
Por la tarde, los agentes localizaron y detuvieron al implicado en un inmueble del barrio Urdanibia donde solía pasar la noche. Tras las diligencias correspondientes, fue puesto a disposición judicial, que decretó su ingreso en prisión.
Un patrón delictivo reiterado
Desde finales de 2024, la Ertzaintza había detectado un incremento notable de robos en los barrios de Ventas, Lapitze y Urdanibia. El acusado escalaba vallas o balcones para entrar en las casas y aprovechaba las vías del tren próximas como vía de escape.
Las investigaciones han permitido vincularlo con al menos una decena de robos en Irun, además de otros cometidos en Donostia / San Sebastián y en Legorreta.






