Lograr el equilibrio entre tecnología, agilidad y colaboración, clave para que el sector alimentario haga frente a las nuevas demandas del mercado

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• Esta es una de las conclusiones del curso de verano de la UPV “Cadena de valor alimentaria 4.0 – Soluciones de hoy y necesidades del mañana” celebrado hoy en Donostia organizado por el Gobierno Vasco y HAZI.

• En el curso se han podido conocer experiencias en cuanto a sensórica aplicada a las pequeñas industrias agroalimentarias y explotaciones agrarias, el geoposicionamiento de ganado y el vallado virtual, las soluciones 4.0 para la elaboración de productos transformados, la optimización de insumos, la teledetección y monitorización agraria y forestal, el blockchain en la cadena de transformación cárnica y pesquera y las oportunidades Big Data en el sector vitivinícola.

Impulsar el emprendimiento tecnológico y diseñar dinámicas inteligentes de colaboración intersectorial para lograr la integración de toda la cadena de valor de la alimentación de Euskadi es fundamental para avanzar en la competitividad de nuestros productos”. Así lo ha señalado el viceconsejero de Agricultura, Pesca y Política Alimentaria del Gobierno Vasco, Bittor Oroz, en la presentación del curso de verano “Cadena de valor alimentaria 4.0 – Soluciones de hoy y necesidades del mañana” celebrado esta mañana en Donostia. Oroz ha añadido que “por ello, el intercambio de conocimientos en estrategias de vanguardia entre los distintos eslabones hará que toda esta cadena mejore su posicionamiento en los mercados y haga un frente común para buscar soluciones y anticiparse a nuevos retos. Producción, industria y distribución han de cooperar”.

Este intercambio de experiencias es lo que se ha llevado a cabo en este curso organizado por el Gobierno Vasco y HAZI. Con un aforo limitado a causa de las medidas anti COVID, las personas que han tomado parte en la acción formativa han podido conocer distintas soluciones encaminadas a la digitalización inteligente de los datos y a la integración de nuevas herramientas tecnológicas en todo el proceso que va desde el campo hasta el consumo de los productos.

La conclusión es que lograr el equilibrio entre esta tecnología, la agilidad de los procesos productivos y la colaboración de agentes sectoriales es fundamental para hacer frente a las demandas del mercado y a las exigencias de calidad y seguridad alimentaria.

Así, se han puesto de manifiesto las ventajas que aporta la transformación digital a un sector agroalimentario que es estratégico por su contribución a la creación de riqueza y empleo. Precisamente por esa posición, debe hacer frente al objetivo transversal de la Política Agrícola Común (PAC) de modernización, recogido en el Marco Estratégico de la Digitalización de Euskadi.

En el curso, se han analizado tecnologías como el IoT (internet of things), la inteligencia artificial, el big data o el blockchain, que facilitan la eficiencia en los procesos y utilización de recursos, la mejora en la toma de decisiones, una mayor rentabilidad con menor riesgo y la posibilidad de anticiparse a las crisis y demandas de los mercados. Además, se han intercambiado experiencias en cuanto a sensórica aplicada a las pequeñas industrias agroalimentarias y explotaciones agrarias, el geoposicionamiento de ganado y el vallado virtual, las soluciones 4.0 para la elaboración de productos transformados, la optimización de insumos, la teledetección y monitorización agraria y forestal, el blockchain en la cadena de transformación cárnica y pesquera y las oportunidades Big Data en el sector vitivinícola.

Todo ello encaminado a lograr un futuro sectorial capaz de ofrecer una alimentación sana que garantice la seguridad alimentaria de manera sostenible y el bienestar animal, que contribuya a la mitigación del cambio climático con un uso más eficiente de los recursos y de la energía y que fortalezca la economía de las zonas rurales. Una cadena de valor de la alimentación inteligente que cree un nuevo modelo de negocio en el que el aprovechamiento de la información entre todos sus eslabones aporte valor al producto y posibilite una innovación constante.