El Consejo de Administración de Lanbide aprueba el modelo de transformación y mejora del Servicio Público de Empleo

0
  • El documento incluye los procesos y plazos para cambiar los modos de atención e intervención con las personas en el centro de las actuaciones

El Consejo de Administración de Lanbide ha aprobado hoy el plan Lanbide Hobetzen, que supone un modelo de transformación y mejora del servicio público de empleo con los cambios en sus aspectos organizativos, de atención, intervención, formación y orientación necesarios, a los que se pone plazo.

Para lograrlo, el Consejo ha destacado expresamente el papel esencial de quienes trabajan en el servicio público, con quienes se adquiere un compromiso manifiesto de información de cada medida a lo largo del proceso.

Bajo la presidencia de la Vicelehendakari y consejera de Trabajo y Empleo, Idoia Mendia, el Consejo ha avalado un proyecto comprometido desde el inicio de la legislatura, que se avanzó el pasado mes de enero, en el que ya se han dado pasos sustanciales y que se seguirá desplegando en los tres próximos años.

El objetivo, según señala el documento, “es lograr un Lanbide que dinamice y mejore la calidad del mercado de trabajo, prestando especial atención a las situaciones y colectivos más desfavorecidos, pasando de ser una organización centrada en la tramitación y la subvención a una organización que presta servicios, a la ciudadanía y a las empresas, y por lo tanto en la que las políticas activas deben ganar peso sin perjudicar la cobertura de las políticas pasivas, evaluando y rediseñando permanentemente los servicios prestados”.

Para ello, todas las áreas y oficinas deben funcionar con un diseño de cartera de servicios, cooperando con una tupida red de colaboradores que la complementan o cubren cuando es necesario. Será un servicio público orientado a resultados que evalúa para medir el grado de consecución de los programas y proyectos y su eficiencia. Con ese fin, se concretan las líneas estratégicas a desarrollar, su prioridad, su dificultad en la implantación y el impacto previsible en la mejora del servicio. Todas las tareas se planifican temporalmente. 

Contexto

El Plan Lanbide Hobetzen se engarza en un conjunto de planes y estrategias con los que está estrechamente interconectado, tanto dentro los previstos en el programa de Gobierno como en el programa Berpiztu, pero también con la Estrategia Vasca de Empleo 2030 y los diseños estratégicos en esta materia del Gobierno de España y de Europa, referidos a las tres grandes transiciones en marcha.

También recoge la incidencia de la integración del IMV en el sistema vasco de garantía de ingresos e inclusión, y el impacto que tendrá la nueva Ley, así como la del Sistema Vasco de Empleo que recogerá un nuevo derecho a políticas activas que deberá garantizar Lanbide.

Junto a la visión cualitativa de la función de Lanbide para lograr un mercado laboral más justo y de mejor calidad, el documento destaca que “el éxito de la intervención pública de Lanbide pasa también por una reconsideración de su relación con las personas usuarias, convirtiéndose en garante del derecho subjetivo a las políticas activas de empleo del que son titulares. Supone situar en el centro de su intervención a las personas, empezando por las que se encuentran en situación de desempleo, pero también a personas ocupadas en riesgo de pérdida de empleo, en situaciones de precariedad o en tránsito hacia otra ocupación por cualquier circunstancia, adoptando un enfoque preventivo y predictivo en su acción a través de la proactividad y la atención temprana”.

A la vez, continúa, está el reto de reforzar el papel de “apoyo y acompañamiento a las personas en situación de riesgo de exclusión social en sus itinerarios, profundizando en el diagnóstico y estratificación de perfiles y necesidades, así como en el desarrollo de planes integrados y personalizados de inclusión, que posibiliten avanzar en la personalización de la atención y en el abordaje intersectorial de casuísticas complejas con otros sistemas del Estado del Bienestar”.

Para conseguir estos objetivos, el servicio público de empleo ha definido este año, con un despliegue completo previsto para el próximo, de un plan de transición digital, que agilizará los trámites y permitirá disponer de una nueva oficina virtual que completará la atención presencial que se seguirá garantizando.